Siete documentos oficiales del Ministerio marroquí de Asuntos Exteriores y de la representación marroquí ante las Naciones Unidas levantan el velo sobre una operación de corrupción de peticionarios extranjeros para defender en Nueva York las tesis de Rabat sobre el Sáhara Occidental. Estos documentos confidenciales fueron obtenidos por el ciberactivista que se presenta en su cuenta de Twitter bajo el seudónimo de « chris_coleman24 », alias el « Snowden marroquí », que ya había revelado numerosos secretos relacionados con el conflicto del Sáhara Occidental. Así, la opinión internacional conocerá los detalles de esta vasta operación de corrupción entre la elección de los peticionarios y los temas de las intervenciones, así como las cantidades pagadas a los oradores que hablan para defender la política colonial de Marruecos, ante la Comisión de Descolonización de la ONU. La misma fuente de información revela también la estrategia de confrontación puesta en marcha por Marruecos para frustrar todas las acciones del Frente Polisario, en el seno de la organización de la ONU. Así, y en una correspondencia confidencial y clasificada, fechada en 2012, el Ministerio de Asuntos Exteriores había encargado al director general de la Agencia Marroquí de Cooperación Internacional que se hiciera cargo de seis peticionarios que luego testificarían ante la ONU a favor de Marruecos. El paquete de apoyo incluía un viático (asignación diaria) de 2.200 dólares estadounidenses para cada peticionario, un billete de avión en clase ejecutiva y el pago de cinco noches de alojamiento en hotel del 7 al 12 de octubre de 2012. para frustrar todas las acciones del Frente Polisario, dentro de la organización de la ONU. Así, y en una correspondencia confidencial y clasificada, fechada en 2012, el Ministerio de Asuntos Exteriores había encargado al director general de la Agencia Marroquí de Cooperación Internacional que se hiciera cargo de seis peticionarios que luego testificarían ante la ONU a favor de Marruecos. El paquete de apoyo incluía un viático (asignación diaria) de 2.200 dólares estadounidenses para cada peticionario, un billete de avión en clase ejecutiva y el pago de cinco noches de alojamiento en hotel del 7 al 12 de octubre de 2012. para frustrar todas las acciones del Frente Polisario, dentro de la organización de la ONU. Así, y en una correspondencia confidencial y clasificada, fechada en 2012, el Ministerio de Asuntos Exteriores había encargado al director general de la Agencia Marroquí de Cooperación Internacional que se hiciera cargo de seis peticionarios que luego testificarían ante la ONU a favor de Marruecos. El paquete de apoyo incluía un viático (asignación diaria) de 2.200 dólares estadounidenses para cada peticionario, un billete de avión en clase ejecutiva y el pago de cinco noches de alojamiento en hotel del 7 al 12 de octubre de 2012. El Ministerio de Asuntos Exteriores había encargado al director general de la Agencia Marroquí de Cooperación Internacional que se hiciera cargo de seis peticionarios que luego testificarían ante la ONU a favor de Marruecos. El paquete de apoyo incluía un viático (asignación diaria) de 2.200 dólares estadounidenses para cada peticionario, un billete de avión en clase ejecutiva y el pago de cinco noches de alojamiento en hotel del 7 al 12 de octubre de 2012. El Ministerio de Asuntos Exteriores había encargado al director general de la Agencia Marroquí de Cooperación Internacional que se hiciera cargo de seis peticionarios que luego testificarían ante la ONU a favor de Marruecos. El paquete de apoyo incluía un viático (asignación diaria) de 2.200 dólares estadounidenses para cada peticionario, un billete de avión en clase ejecutiva y el pago de cinco noches de alojamiento en hotel del 7 al 12 de octubre de 2012.
En otro documento del mismo departamento se mencionan los nombres de nueve peticionarios, periodistas, juristas, académicos e historiadores, así como los temas sobre los que iban a intervenir, entre otros sobre las reformas políticas en Marruecos y la iniciativa marroquí de autonomía. y su conformidad con el ejercicio de la libre determinación. Además, en una tercera correspondencia, titulada Nota marco, dedicada a las cuestiones y objetivos de Marruecos en relación con la 69ª Asamblea General de la ONU, celebrada en 2014, Rabat pidió a su delegación, la cuarta comisión encargada de la descolonización, que fuera ofensiva y que fuera a la “confrontación” y al “combate, para no dar a Argelia y al Polisario la oportunidad de defender” la causa. En junio de 2015, “chris_coleman24” confundió al embajador de Marruecos ante la ONU, Omar Hilale, involucrado en un asunto de corrupción que afecta a altos funcionarios de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU (ACNUDH). La información fue recogida por la revista estadounidense ‘Forein Policy’, uno de cuyos temas centrales es Foreign Affairs. En el centro de este escándalo está el entorno cercano de la ex Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Navi Pillay, infiltrada por Marruecos para manipular la gestión del expediente de las violaciones de los derechos humanos en el Sáhara Occidental. El periódico estadounidense afirma también que la Oficina de Servicios de Supervisión Interna intentó interrogar al diplomático marroquí sobre este asunto para aparentemente cerrar el expediente sobre la presunta implicación del sueco Anders Kompass, director de operaciones del HCDC. en el campo y colaboradora cercana de la Sra. Pillay. Según “chris_coleman 24”, Kompass fue manipulado por Marruecos para evitar una investigación sobre la situación de los derechos humanos en el Sáhara Occidental. El Makhzen implementó una verdadera estrategia de infiltración y presión sobre la primera jefa del HCDC, a través de su entorno que la influyó, directamente sobre la cuestión saharaui. Más allá del simple trabajo de lobby, los documentos de la misión marroquí en Ginebra, rubricados por Omar Hilale, pirateados por el ciberactivista hacker, ponen de relieve una red para bloquear el expediente de los derechos humanos en el Sáhara Occidental. El dinero parece ser la primera palanca de persuasión utilizada por Rabat para convencer a los altos funcionarios de que no miren de cerca la situación en el Sáhara Occidental y defiendan las posiciones marroquíes ante el Secretario General de la ONU. El apoyo financiero, la filtración de información sensible, la presión y la manipulación han sido hasta hoy las armas favoritas de Marruecos para no verse atrapado en esta cuestión.
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