Experto español sobre el Sahara Occidental: ‘Ni duele mucho, ni es muy caro, ni es una prioridad’

Pocas veces en la Historia los derechos de un pueblo a su independencia han sido tan documentados y consensuados por la comunidad internacional como el caso del pueblo saharaui. Tienen derecho a su territorio y nadie lo pone en duda (excepto Marruecos, país ocupante ).

La historia del pueblo saharaui y su territorio, del tamaño de España (alrededor de 200.000 km 2 ), es muy conocida, pero intencionalmente ignorada.

El Sahara Occidental fue una provincia española ubicada en el norte de África hasta 1975, cuando, desoyendo los pedidos de Naciones Unidas de iniciar el proceso de descolonización , Madrid abandonó el territorio, para que lo ocuparan Marruecos y Mauritania que lo reclamaban.

Fueron meses cruentos. Marruecos desplaza hacia el Sahara a 350.000 personas del norte para colonizar la zona mientras bombardeaba a los saharauis que huían acompañados por el Frente Polisario.

Luego de la ocupación vino la guerra de Marruecos y Mauritania contra el independentista Frente Polisario. Mauritania se retira del conflicto en 1979 y firma un acuerdo con el Polisario.

En 1991, Marruecos y el Frente Polisario suscriben el plan de arreglo en el cual el rey marroquí de entonces, Hassan II, acepta la realización de un referendo de autodeterminación que, hasta la fecha, 27 años después, no se ha realizado por desacuerdo sobre un punto esencial: quiénes votan.

Muchos expertos llaman a estos hechos “la traición española”, y el Gobierno del país se escuda en una neutralidad activa mediante la cual no está ni con uno ni con otro, pero quiere ser tomado en cuenta. Además, financia parte de la ayuda humanitaria al pueblo saharaui.

Para dar un seminario sobre este conflicto olvidado, la Escuela de Ciencias Políticas de la Universidad de Costa Rica invitó al experto español Isaías Barredaña, de la Universidad Complutense de Madrid.

¿Por qué si la ONU se pronunció por la autodeterminación, aún el Sahara Occidental es un territorio ocupado?

Porque los saharauis son pocos, están en un sitio apartado, no suponen, por ahora, un riesgo importante para la seguridad internacional.

”Ninguna potencia está dispuesta a forzar la máquina, a empujar para que se resuelva. El costo que tiene es un costo político bajo y la asistencia a la población es asumible. Así de crudo. Por lo tanto, el tiempo juega a favor de Marruecos”.

¿Por qué usted habla de una descolonización fallida cuando ese proceso nunca se inició?

Es cierto que no hubo una descolonización tal y como estaba prevista. Hubo un abandono de parte de España, porque como potencia colonial le correspondía encarrilar el proceso de independencia.

”Dada la coyuntura del momento –las últimas semanas de vida del jefe de Gobierno español, el general Francisco Franco, y Marruecos que tensa la cuerda porque moviliza a parte de su población hacia el Sahara en la llamada Marcha Verde– los círculos de poder en torno al dictador decidieron romper con la diplomacia del franquismo de aceptar los compromisos y obligaciones de potencia colonial.

”De hecho, España había admitido en 1974 que se iría del Sahara, pero en pocas semanas se decide por una vía no convencional, cual es ceder el territorio a dos estados vecinos que tenían pretensiones de anexión. Ese abandono supone una responsabilidad para el Estado español porque tenía la obligación, y lo había reconocido así, de tutelar el proceso de independencia y no lo hace, simplemente abandona.

”No solo eso, sino que fija dos meses para la evacuación del personal civil y militar y entonces el Parlamento franquista aprueba un decreto mediante el cual España corta todo vínculo jurídico con el Sahara y de la noche a la mañana, ciudadanos saharauis dejan de ser ciudadanos españoles. Son muchos los juristas que consideran que España es de jure (de hecho) el administrador del Sahara todavía en la actualidad, porque se trata de un territorio sin descolonizar.

”De los 17 territorios que están en la misma condición, solo el Sahara Occidental no tiene un administrador claro. Marruecos dice que no es administrador, sino soberano, y España dice que no tiene ya nada que ver”.

Hay un dictamen de la Corte Internacional de Justicia que aplasta las demandas de soberanía de Marruecos…

En 1974 la Asamblea General de la ONU pidió a la Corte una opinión consultiva. En octubre de 1975, un mes antes de que muriera Franco se publica la opinión de la Corte sobre las dos preguntas que se le plantearon: ¿Era el Sahara Occidental un terra nullius (tierra de nadie)?

”La segunda: ¿Existía vínculo histórico entre las tribus saharauis y las autoridades políticas históricas de Marruecos (el sultanato), y las de Mauritania y eso fundamentaba algún reclamo de soberanía?

”En 200 páginas, la Corte responde que ese territorio no había estado integrado a ninguna autoridad política. Segundo, en efecto, algunas tribus saharauis tuvieron, en algún momento, relaciones de vasallaje con el sultanato o con las autoridades mauritanas. Pero, dice, eso no significa que constituya base para reclamar la soberanía.

”Por lo tanto, primaba el derecho a la descolonización y a la autodeterminación, así lo dice el dictamen. Naciones Unidas y diferentes resoluciones han reconocido que el pueblo saharaui es un pueblo colonizado y que tienen derecho a la descolonización. No hay más. Eso dice el derecho internacional”.

Un pueblo dividido

El plan de arreglo de 1991 establece dos fases, pero solo una se puso en marcha. ¿Qué frenó el referendo?

El primer componente fue el cese del fuego y la creación de una misión de ONU para vigilar su cumplimiento (Minurso). El segundo componente era una consulta a la población saharaui y es ahí donde se atasca.

”Creo que se bloqueó porque Marruecos percibió que si se hacía la consulta solo entre los saharauis, era muy probable que perdería. Todo está listo, toda la documentación preparada, solo que fue archivada en Ginebra, porque quedó claro, a principios del 2000 que Marruecos nunca se sometería a un referendo que no pudiese ganar.

”En 2007, Marruecos lanza una propuesta de autonomía dentro del Estado de Marruecos, pero los saharauis se atienen a la concepción inicial y la rechazan.

Naciones Unidas ha renunciado a forzar a las partes a una solución mientras las potencias siguen con el paradigma de hallar una fórmula satisfactoria para las dos partes, algo muy complicado en un caso de ocupación”.

Algunos expertos dicen que Europa es rehén de Marruecos…

Así es, totalmente secuestrada. Marruecos ha sido un importante socio, no solo de la Unión Europea (UE) sino también de los estados miembros.

”Para España, Marruecos es un país importante, igual que para Francia, por su cercanía, por los lazos económicos, culturales, políticos. Para España, Marruecos es un socio imprescindible en la gestión de movimientos de población, es decir, de migrantes, es un socio comercial muy importante y ciertos sectores económicos en España, como la pesca, dependen de los acuerdos de Marruecos con la UE”.

Marruecos desempeña un papel importante en el control migratorio…

La crisis migratorio de estos tres últimos años ha tenido por escenarios el corredor central: Libia, Túnez, Asia, Malta, Italia y el corredor de los Balcanes: Turquía y Grecia. Curiosamente, la vía occidental, la que venía por Mauritania, Sahara Occidental, Marruecos o Argelia, apenas ha tenido actividad en estos últimos años por una razón sencilla: las políticas puestas en marcha en los últimos años, entre la UE y Marruecos, pero sobre todo entre España y Marruecos, han funcionado.

Es decir, la política de externalización del control, convertir a Marruecos en gendarme migratorio y en línea de contención para sus migrantes marroquíes y para los subsaharianos.

¿Qué dice este conflicto y sus 40 años sobre la efectividad de los mecanismos multilaterales de resolución de conflictos?

Ilustra cómo Naciones Unidas ha provisto (desde 1960) de un importante acervo legal en defensa del derecho a la autodeterminación de un pueblo colonizado, ha intentado impulsar un arreglo, presta atención a un conflicto de larga duración, etc.

“Sin embargo, al mismo tiempo, ha sido incapaz de activar mecanismos coactivos cuando un Estado se niega a colaborar en la resolución de un conflicto y cuenta para ello con el apoyo de una potencia o de un miembro permanente del Consejo de Seguridad, como en este caso Marruecos, respaldado por Francia”.

Es decir, Marruecos tiene la carta ganadora…

En realidad hay consecuencias, porque hoy existe una mayor tensión entre Marruecos y sus socios: con Estados Unidos y Francia por el tema de los derechos humanos. Con la UE por la aplicación del tratado del acuerdo comercial incluyendo al Sahara, con Mauritania, que considera que la ocupación es ilegal, y con el secretario de ONU.

”Esto significa que el conflicto del Sahara está contaminando sus relaciones internacionales”.

La República Árabe Saharaui Democrática (RASD) –Estado saharaui– acaba de estrenar un nuevo líder ante la muerte de Mohamed Abdelaziz. ¿Se prevé algún cambio de estrategia?

Brahim Gali es un hombre de la línea de Abdelaziz, no se prevén cambios importantes: seguir apegados al derecho de descolonización que les asiste y a la vía del diálogo.

Aunque no haya resultados…

Esa es una lectura. Aunque hasta ahora no han obtenido los resultados esperados, los conflictos no se congelan, se transforman siempre.

”Han aparecido nuevos fenómenos: el saharaui es hoy un pueblo transnacionalizado, viven en distintos ámbitos, la diáspora, las zonas ocupadas, los campamentos, y han construido una nueva identidad transnacional muy nacionalista.

Por otra parte, el protagonismo de la resistencia ya no está en el exterior, utilizando las armas, sino en el interior, en los territorios ocupados, utilizando la lucha pacífica. Hoy, por todos los sitios hay asociaciones, militantes, radios clandestinas, prensa clandestina, grupos de abogados, hay un gran activismo en los territorios ocupados que es una nueva dimensión de la lucha”.

Se dice que los jóvenes quieren volver a la lucha armada…

Creo que los jóvenes quieren utilizar algunos medios que rompan el falso equilibrio, algo que precipite los acontecimientos. Abdelaziz decía que si no se llegaba a un acuerdo político, se estaba obligando a la población saharaui a recurrir a la violencia, que es un derecho reconocido para los pueblos coloniales. Naciones Unidas reconoce el derecho de los pueblos a la violencia para conquistar su independencia.

La Nación, 12 sept 2016
Tags : Sahara Occidental, Frente Polisario, Marruecos, Unión Europea, ONU, UE, MINURSO, autodeterminación,

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